Claudio Laguna

Productor de "Estación Rock" en Hermosillo, Son. Mexico

Generación híbrida

En estos tiempos en el que prácticamente podemos conseguir todo con mover un dedo en el teléfono celular, el avance del desarrollo tecnológico, el internet, redes sociales, para las nuevas generaciones se les hace imposible creer que hubo un tiempo en el que no había nada de esto, que buscar información era ir a la biblioteca no a google, que para tener una foto era necesario tomarla con una cámara de rollo de película y esperar el revelado y hasta entonces saber si se tomó bien la foto o salió desenfocada. Ahora solo es cuestión de descargarla de alguna página de internet. De las fotos, ahora puedes tomar mil y revisarlas en el acto.

(Las cabinas de radio de antaño contaban con una consola central que controlaba todos los aparatos, caseteras, tornamesas, grabadoras de carrete y micrófonos.)

Y así podemos mencionar infinidad de ejemplos que nos hablan de la evolución de las comunicaciones. Para los que se nos considera de esa llamada “generación X” somos seres especiales a los que se nos ve como entes raros ya que hablamos de esas tecnologías que para las nuevas generaciones se les hacen cosas del pasado e imposibles de explicarse en el mundo moderno en el que viven ahora.

(Las grabadoras de carrete abierto era la más profesional que había en cuanto a producción y reproducción de música.)

Hablando de medios de comunicación y en específico de la radio la evolución dio un paso muy drástico, al grado que la radio que conocíamos antes del internet está tendiendo a desaparecer. Y vamos hablar de esa radio de antes del internet y de la era digital.

(Las revistas especializadas era la forma en que se podía estar al tanto del acontecer de la escena del rock internacional.)

Antes de entrar a una cabina de radio de antes de los 90´s hay que comprender como nos hacíamos de nuestra música favorita. El primer paso fue la creación de los llamados discos de larga duración o “long play” de ahí el término abreviado de LP, discos de vinilo impresos por ambos lados (de ahí lo de lado A y Lado B) por lo regular tenían en capacidad para 10 canciones, 5 de cada lado (cuando se programaba por lo regular se pedía el lado y número de tema, “lado A, banda 3” y así sabíamos que era el tercer tema de la cara principal del disco).

En la década de los 70´s era lo mas modero, los cartuchos de 8 tracks que facilitaban traer la música en el carro.
(En la década de los 70´s era lo mas modero, los cartuchos de 8 tracks que facilitaban traer la música en el carro.)

Luego salió la versión compacta, los discos de 45 rpm, pequeños acetatos que solo contenían dos temas uno de cada lado y por lo regular el principal era el del lado A, relegándose o siendo un tema menos importante el del lado B (de ahí el término en el cine, películas tipo B, por ejemplo, para referirse a contenidos pobres o de baja calidad). Pero la necesidad de hacer las cosas mas practicas y mas a la mano y que se pudieran utilizar en cualquier lugar hicieron que se buscaran formatos mas pequeños y compactos y el primer intento fueron los cartuchos de 8 tracks, con lo que las radios de los automóviles, pasaron a tener los primeros estéreos, algo voluminosos pero en si una novedad que te permitía traer y escuchar tú música favorita.

Los discos LP´s y el formato de 45 rpm que dio lugar al nacimiento del famoso “single” o sencillo promocional del disco LP.
(Los discos LP´s y el formato de 45 rpm que dio lugar al nacimiento del famoso “single” o sencillo promocional del disco LP.)

La revolución llegó con el cassette, un formato mas pequeño que desplazó a los 8 tracks, hizo de los estéreos mas pequeños y funcionales y algo sumamente importante, ¡¡se podían grabar en ellos!! Y de lo que antes eran las consolas que adoraban las salas de nuestros padres o abuelos, pasamos a las grabadoras estéreo que podíamos transportarlas, oír nuestra música y grabarla.

(Los cassettes llegaron para sustituir a los 8 tracks, mas compactos, mas fáciles de usar mas prácticos y con un gran ventaja, se podía grabar en ellos.)

Pero la necesidad de hacer todavía mas practico el traer tú música favorita dio paso a principios de los 80´s la aparición del “walkman” un pequeño aparato que reproducía tú cassette favorito y lo podías traer montado en la cintura del pantalón escuchando a través de unos audifónos. Cassettes y discos LP convivían sin “pelearse” las bandas sacaban sus producciones en ambos formatos y ya dependiendo de la posibilidad económica optabas por uno u otro. La aparición en el mercado de los CD´s marco el desplazamiento de los anteriores formatos y cuando se pudo ya grabar en estos, el fin de discos y cassettes se empezó a definir.

(El walkman vino a revolucionar la forma de oír música. Con el podías llevar tú música a cualquier lado.)

Hasta la década de los 80´s el mundo de la música y de la radio vivía en una era análoga. Entrando en materia y dentro de una cabina lo mas profesional con lo que se podía trabajar era, aparte de los formatos de discos LP´s y cassettes, con cintas de carrete abierto y dependiendo del grosor de estas era su calidad. Una cabina de radio o de grabación contaba con una gran consola central que te permitía regular el sonido de todos los aparatos conectados y microfónos, en esa consola se controlaban las caseteras, tornamesas, terminales de 8 tracks y grabadoras de carrete abierto y la microfonía. Pero la materia prima, la música, como se conseguía sin internet? Básicamente dependíamos de las disqueras y sus promotores, que visitaban a las radios con su catálogo de artistas y nos dejaban el material que estaban produciendo de sus artistas y grupos (después vendría la famosa “payola”en el que los promotores se “arreglaban” económicamente con el programador de la radio para que determinado grupo o artista de ese catálogo sonara mas frecuentemente).

(El disco “metalmorfosis” fue el único disco que llegó a México de Barón Rojo. La “movida madrileña” nos paso de noche.)

Cuando Rock en tú Idioma, se convirtió en “rock en tú maroma”

Finales de los años 80´s, y el concepto de “rock en tú idioma” estaba en su punto mas alto, el rock latinoamericano había tenido un gran impulso, era el “boom” del rock en español y dentro de esa inercia, Ariola, que era la disquera que estaba manejando en México el concepto, decidió hacer un concurso nacional para descubrir nuevas bandas y Sonora fue incluido como una de las sedes nacionales, siendo Hermosillo donde se realizaría el evento.

La sede fue lo que se conoció como la discoteca “Blocky´O”, por el Blvd. Rodríguez, enfrente del “reloj de la Ford” lo que es ahora un casino, en el estacionamiento de la misma. Estación Rock estuvo ahí ya que siendo el único en ese entonces espacio de rock y metal y de que difundía a las bandas locales, fue el canal para también hacer la invitación a través de Radio Sonora, donde se transmitía el programa.

El hecho es que generó mucha expectación e interés de muchas bandas de todo el estado que hicieron el esfuerzo para hacer el viaje a la capital del estado. Con un escenario limitado al igual que el equipo de sonido la presentación de las bandas dio inicio. Tanto fue el interés y la expectación que el lugar resulto insuficiente para la gran cantidad de rockeros que se dieron cita.

Algunas bandas que se “lucieron” por su material y por las ganas de querer destacar, recordamos a los de Nogales, Sonora, Agressor y Sangre y Sudor, también a Anatema y Democracia Real y que decir de los locales de Ataxia que se aventaron un buen cover del argentino Charly García, “nos siguen pegando abajo”.

El evento se empezó a salir de control, por la gran cantidad de gente, el poco espacio, la molestia por no poder ver bien a las bandas, por lo bajo y reducido del escenario, fallas en el sonido y también porque se empezó a cobrar la entrada.

El evento iba a sacar una banda ganadora por lo cual había una mesa de jueces al frente del escenario, donde recordamos a Manuel Borbón que era el encargado de la sección de espectáculos del periódico El Imparcial y la directora en ese entonces de Radio Sonora, Jossie Robles.

Al final, el ganador fue Jorge Martin Aguilar que no tenía nada que ver con el mundo del rock y que ganó con una balada, generando la molestia del resto de las bandas y del público, lo que provocó un caos y desorden que se desbordó, pero que afortunadamente no paso del susto, pero generó una sensación de que el concurso había resultado un fraude y no lo que prometieron. Lástima, lo que pudo haber sido un buen escaparate para las bandas locales resultó en un “caos en tú idioma”.

Historias a 33 rpm

Claudio Laguna
Productor de Estación Rock
Con la colaboración de Juan Feria, Mat Hnedy y Nathan Larrinaga

Estas cintas reflejan un poco o un mucho de lo que hacíamos para tener un programa de calidad, un espacio que estuviera en el gusto de los rockers. Estas cintas reflejan el trabajo que hacíamos para generar contenidos interesantes además de la música que programábamos. Ahí están los “editorocks” que eran pequeños aportes de análisis a ciertos temas delicados que al estarlos escuchando de nueva cuenta, oímos que no han perdido vigencia, reflejo de que no se han resuelto esas problemáticas.

Ahí están grabadas “tocadas” con las que buscábamos tener material de esas bandas para poder compartirlas durante el programa. Nunca pensamos en hacer una memoria histórica, pero en cierto punto la formamos. Guardamos estas cintas, por gusto, por nostalgia, por pensar que algún día servirían para algo. Nunca dimensionamos el avance de la tecnología y de que estos recuerdos revivirían algún día.

Muchos de los que se oyen en esas cintas, ya rondan la mitad del siglo en este mundo. Quizá no recuerden muchos hechos, ni siquiera que estuvieron ahí, pero esta memoria mal organizada al menos sirve para recordarnos que alguna vez existieron el “music house”, el XX, el casino de la Bimbo, el casino del río, la “casa verde”, el Castro Servín” de la Universidad de Sonora, el gimnasio del estado, ahora arena Sonora. El “burbujas” porque si, hasta locales para fiestas infantiles sirvieron de escenario para la expresión del rock en nuestra ciudad.

Bandas como La Cruz, Khafra, Agressor, Sangre y Sudor, Reptil, Ateo, Suciedad Discriminada, Los tres cochinos y el Sistema Feroz, Ataxia, Neumatrax, Lynx y hasta los mismos Interrogación y hasta La marina, nos toco verlos tocar en esos lugares y muchas otras bandas que iniciaron su camino esa década de los 80’s y que llegaban a la cabina de Radio Sonora los viernes en la noche con un cassette, que les servía como demo, buscando un espacio para darse a conocer.

Hay mucha historia que estaba olvidada y empolvada en algún rincón de la memoria, empieza a emerger de esas neuronas con oxido de mas de 30 años. Que salga a la luz y que nos ayude a entender la “escena” de hoy.